No hace mucho tiempo que Dios empezó a tratar conmigo fuertemente. Necesitaba y con desesperación regresar a la sana doctrina . Y necesitaba dejar de coquetear con el mundo. Ya desde 2007 conocía yo las predicas del pastor Chuy Olivares por MP3 en ese tiempo. Así que estando en una prueba, buscando respuestas, me acorde que este hombre de Dios enseña clara y llanamente la sana doctrina.
Sin caer en idolatrías (y no poniendo ni la vista ni la confianza en el hombre), no puedo dejar de comparar al alimento espiritual que los pastores y maestros de la biblia nos dan a la ovejas, con el alimento físico.
En verdad que el alimento viene de lo alto, ministrado por Dios por medio de su palabra. El pastor es como un chef experto que lo prepara para darlo al rebaño que el Señor le confió. Pero mientras que hay algunos hermanos que parece que hicieron una sopa instantánea o unos sandwiches rápidos para alimentar a su grey; el pastor Olivares parece esforzarse en cocinar a fuego lento y delicadamente cada enseñanza que da, cada predica usando siempre como único ingrediente la palabra de Dios pura y sin adulterar. Y el resultado es un platillo de «alta cocina» que se disfruta escuchar. Pero estoy cierto también que eso es gracia de Dios, por lo que la Gloria sea a Dios. Y al pastor Bendiciones.
El siguiente mensaje me despejo tan nítida y claramente, con base en la escritura, el porque Dios permite las aflicciones; que creo debe ser compartido «de gracia» como Dios nos salvo de Gracia.
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